Desde la banda

Por: Gabriela Martínez

La “crisis” en el América

Ciudad de México, Ciudad de México a 05 de diciembre del 2021.- América es un equipo importante, por algo es nombrado uno de los cuatro grandes del fútbol mexicano. Esto lo obliga a ser el centro de atención, ganar a como dé lugar y tener los mejores jugadores de la Liga MX, pero si no cumple esas expectativas, las críticas llegan y se llevan todo por delante.

En esta liguilla, las Águilas iniciaron en la primera posición de la tabla y en los cuartos fueron eliminados por el onceavo equipo: Los Pumas. La derrota no cayó bien y de inmediato hubo comentarios negativos, especialmente hacia el entrenador Santiago Solari y sus planteamientos. A partir de entonces, la palabra “crisis” acaparó los titulares para referirse al estado de la escuadra de Coapa.

Pero ¿en realidad hay problemas en el club azulcrema? Honestamente, no lo creo. Cualquier equipo, el que ustedes me digan, le juega diferente a las Águilas; todos dan el máximo porque se trata de ganarle al poderoso. Por otra parte, llegar al punto cumbre de productividad antes de las últimas jornadas no ayuda, pues la fase final es distinta y la “maldición” del primer lugar suele ser contraproducente.

Luego, está el factor Solari-Córdova. Sebastián Córdova es un futbolista desequilibrante y hábil. En el campo le da una cara distinta al América, pero no todos los jugadores entran en el esquema del entrenador; en este caso, Solari. Si se analiza bien el funcionamiento del equipo, nos podremos dar cuenta de que las Águilas atacan desde las bandas y uno de los requisitos necesarios para lograr ese estilo de juego es la velocidad, la cual Córdova no posee.

Los detractores del entrenador no ven todo eso y hasta parecen ser los representantes del jugador. Incluso se ha dicho que es un error de la directiva mantener a Solari en el cargo. Es válido reconocer el desempeño de Córdova, pero para tomar las decisiones adecuadas es necesario estar en el lugar indicado. Créanme: la situación del América no cambiará sustituyendo a Santiago.

En el club de Coapa la exigencia siempre se mantendrá en niveles altos y si no hay título, el término “fracaso” será la constante en los medios. Entonces, dejemos de exagerar un hecho más común de lo que se dice: solo fijémonos en las vacantes de empleo publicadas para perfiles específicos. Tal vez la salida de Córdova tampoco mejore las cosas en el América, pero aún falta tiempo para saberlo.