Por: Gabriela Martínez

Ciudad de México, Ciudad de México a 08 de marzo del 2020.- Tengo una pesadilla recurrente, en el sueño voy en un taxi y de pronto el taxista voltea y con cara malvada me grita que me va a secuestrar.

La angustia que llegó a sentir es indescriptible, gracias a Dios, despierto y la pesadilla termina.

No me puedo imaginar lo que sintieron las mujeres que han sentido esto en carne propia, aquellas que no volvieron, aquellas a las que les frustraron la vida, les truncaron sus sueños y peor aún, aquellas que no han recibido justicia, porque el agresor sigue libre.

Las cifras oficiales dicen que en México son asesinadas 10 mujeres al día. La realidad sobrepasa a las cifras oficiales, porque hay muchos casos que no se conocen.

Hay quienes son violentadas y prefieren, por distintos motivos, no denunciar.

Ser mujer en México es terrible.

Este 8 de marzo de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer, el hecho que se conmemora es la muerte de 100 trabajadoras textiles, mujeres inmigrantes en su mayoría, que murieron en el incendio de la fábrica de Triangle Shirtwaist de Nueva York, como consecuencia de las precarias condiciones laborales de las que eran presas.

En México, miles protestaremos por aquellas que ya no pueden, que ya no están, o que tienen miedo. Protestaremos porque merecemos respeto, merecemos tener el mismo sueldo, merecemos tener seguridad, merecemos la libertad de dedicarnos a lo que queremos y vestirnos a nuestro gusto.

Yo me solidarizó con todas, porque hay muchas mujeres a las que amo, y deseo que nadie pase por una experiencia de dolor, violencia, discriminación, acoso y maltrato.

Tengo una familia que nunca ha hecho alguna diferencia entre hombre o mujer, que me ha impulsado a estudiar o realizar la actividad que yo decida, que me impulsa, respeta y escucha mi voz.

Que este 8 de marzo se escuchen las voces de todas, por que YA BASTA.

Ni una Menos.