Área Técnica
Roma no se hizo en un día
Por: Jorge Raúl Nacif
El Imperio Romano marcó un hito en la historia por su majestuosidad, además de consolidar estructuras políticas, sociales y económicas que, con el tiempo, sellaron también el desarrollo del Estado Moderno. No obstante, bien se decía desde aquellas remotas épocas que “Roma no se hizo en un día”.
Los proyectos que pretenden ser serios requieren tiempo, de tal guisa que los resultados inmediatos no siempre son un buen síntoma. Colocar los cimientos suele ser lo más tardado en el proceso de levantar una construcción, pues sin su solidez toda la estructura tenderá a tambalearse.
Todo este preámbulo enmarca la situación actual del Atlético Morelia, que ha tenido un arranque flojo. No debemos olvidar que estamos hablando de un equipo nuevo en la mayoría de los sentidos y es menester tener paciencia para disfrutar la consolidación que tanto anhelamos.
Es más, casi diría que este primer torneo es algo así como un “piloto” que permitirá encauzar las líneas generales y particulares. Cierto, José Luis Higuera y la familia Arana tienen experiencia en el negocio del fútbol, pero una nueva plaza requiere procesos de aprendizaje y adaptación.
En realidad, este equipo se armó en tan sólo mes y medio. ¿Cómo esperar un conjunto avasallador si hace seis semanas ni siquiera existía? No. Así no es el fútbol… así no es la vida.
Dejando de lado la parte administrativa, existen varias aristas en lo futbolístico. De entrada, no llegaron tantos elementos de Zacatepec; esto implica que la mayoría de los futbolistas jamás habían jugado juntos. La coordinación entre líneas es cuestión de trabajo constante, al igual que la construcción de asociaciones dentro del campo de juego, algo de lo que se habla poco pero tiene un valor inmenso.
Lo anterior sumado a que solamente hubo oportunidad de un partido de pretemporada -debido al apremio del tiempo-, así que estos primeros partidos representan parte de la preparación. La parte física también es un tema para traer a colación, pues en ambos partidos el equipo terminó “tirando el bofe”, como coloquialmente se dice.
Es comprensible que la afición quiera triunfos y buen funcionamiento, máxime después del cobarde despojo sufrido, pero también debe caber la ecuanimidad que nace de conocer y comprender las circunstancias.
¿Exigencias? Claro, ahora mismo el esfuerzo y trabajo constante, pero el buen fútbol y la constancia de triunfos serán una asignatura ineludible para el torneo entrante. Cierto es que la ciudad, la afición, los colores y la plantilla armada, demandan títulos; sin embargo, las circunstancias indican que este Apertura Guard1anes 2020 es de asentamiento.
Paciencia es quizá la virtud que más debemos poner a prueba en este momento. Finalmente, “Roma no se hizo en un día”.