Las mujeres saudíes se rebelan con el deporte
Por: Gabriela Martínez
CIudad de México, Ciudad de México a 29 de noviembre del 2020.- Las mujeres del mundo cada día exigen tener los mismos derechos que los varones. Desde las actividades cotidianas hasta las profesionales o empresariales, la brecha en la mayoría de los países se ha reducido, pero hay lugares donde ellas no son dueñas siquiera de sus decisiones.
Arabia Saudita poco a poco ha dado más apertura y libertad a las mujeres; sin embargo, aún siguen muy atrasados en ese país. Ahora, ellas ya pueden manejar, pero todavía necesitan el permiso de algún varón de su familia para otras necesidades catalogadas como básicas en otras naciones. Un ejemplo de esto es que allá las mujeres no pueden elegir su vestimenta y eso también se traslada al deporte.
Por mencionar un caso, a los Juegos Olímpicos de Río 2014 solamente fueron 4 mujeres representando a ese país, un récord para esa delegación en la justa deportiva. Esas atletas debieron usar indumentaria que les tapara todo el cuerpo para seguir las reglas saudíes aún cuando no estaban en territorio de su nación. Con ese antecedente, hoy celebro el inicio de la primera liga de futbol femenil de Arabia Saudita.
Esta liga tendrá restricciones tales como que únicamente será en una región específica por la falta de apoyo económico y a los estadios solo podrán asistir mujeres (incluyendo jugadoras, personal del inmueble y árbitras). No obstante, dentro de esos límites hay una pequeña luz: los partidos no serán televisados, por lo tanto, las futbolistas tendrán la libertad de usar un uniforme de futbol como lo conocemos y también podrán gritar sin tapujos.
Parece irónico festejar los primeros pasos de una liga femenil donde no hay figuras o patrocinadores importantes respaldándola, más cuando ves algunas como la española, la inglesa o la francesa invirtiendo dinero para desarrollar el talento desde las fuerzas básicas, pero, créanme, tener una en ese país de Asia Occidental es un logro porque allá los derechos de las mujeres valen muy poco. De hecho, recientemente, Amnistía Internacional pidió a los líderes del G20 que demandaran la liberación de activistas saudíes quienes han sido torturadas y encarceladas. Su delito: demandar la equidad de género.
A partir de este año, durante 90 minutos, las mujeres de Arabia Saudita no serán juzgadas ni dependerán del permiso de alguien más para expresarse; podrán disfrutar a su manera y tener un respiro sin temor a la censura. Dar este breve espacio de libertad es un triunfo para ellas. Ojalá que los medios internacionales le den seguimiento para difundir tanto el talento como las voces de estas futbolistas y así les otorguen su merecida relevancia.
