Con silbato y pluma

El regreso de un gigante

Por Benjamín Zarco

Primero, antes de iniciar este pequeño escrito cabe recalcar que lo aquí redactado es meramente opinión propia basada en datos estadísticos y, así mismo, gusto propio por el esplendor de este fabuloso deporte.

Se ha dicho que el fútbol es un deporte de velocidad, de habilidad y juventud, que ha cierta edad no te alcanza para lograr soportar más de 45 minutos en el máximo potencial. Poco a poco esos relatos de la vida de un futbolista profesional se han ido despejando y han dejado en claro que ciertos jugadores son la gran excepción de dicho paradigma.

El atacante sueco de 39 años, Zlatan Ibrahimovic es el claro ejemplo de lo antes comentado. El nacido en Malmo, Suecia ha sido indiscutiblemente uno de los mejores atacantes de los últimos años, sino hasta el mejor 9 de los últimos diez.

Cuando un jugador es “veterano”, normalmente decide terminar su carrera en un club de una liga poco conocida o con poco arraigo, tal sea el caso de trasladarse a Estados Unidos, firmar un suculento contrato y terminar allí, en la MLS (Major League Soccer) su carrera. Otros, optan por viajar al medio oriente, ya sea en Qatar, en China o hasta en Japón; Ligas que buscan a billetazos hacer extender sus certámenes, que más y más publico vea su futbol y sean reconocidos mundialmente.

A mediados del año 2018, “El Gigante Sueco” decide aventurarse al país de los yanquees, tal decisión causó gran revuelo a nivel mundial y declaraciones de diversos medios de comunicación daban como hecho el término de su carrera profesional al concluir su contrato con LA Galaxy, club con el que firmó por dos temporadas.

Pero… ¡Oh, sorpresa! ¡NO! No fue la última acción del nórdico. Para sorpresa de todos, en diciembre de 2019 el atacante veterano decidió regresar a la élite, regresar a una de las mejores cinco ligas del balompié mundial, la Lega Serie A. en Italia. ¿Su nuevo club? Un viejo conocido, el Diablo, los Rossoneros, el AC Milán.

Inmergido en una crisis tremenda, el cuadro italiano vio en Zlatan un embrión anímico, un jugador que aparte de buen fútbol, podría ser la catapulta para que los jugadores inscritos en dicho club fomentaran una subida de ánimos… y así fue.

Hoy en día, Milán goza de adjudicarse como segundo de la tabla general, buscando aun la pelea por el titulo de la liga a falta aun de diez fechas por disputarse y, a pesar de que Zlatan se ha perdido una gran cantidad de juegos desde su regreso al balompié europeo, su presencia en el cuadro lombardo ha sido vital, puesto que ha refrescado el ataque y demostrado características que hace años no se le veía al club de San Siro.

Allí no para todo, pues a sus 39 años. ¡SÍ! 39 años, vuelve a la selección absoluta de su país. Tuvieron que pasar mas de cinco años para que esto sucediera, cinco largos años para que el “Gigante de Malmo” pise nuevamente el empastado de las tierras escandinavas y busque poner en alto el nombre de su país.

Con esto, cabe recalcar que lo realizado por el atacante deja un grato sabor a los amantes de la redonda. Los milanistas sueñan con el regreso a los momentos de gloria. El fútbol aclama el regreso del Gigante Sueco y del Gigante de Italia.

Se extraña al equipo de aquel Arrigo Sacchi y los holandeses; de aquel Capello que los llevó a triunfar en Atenas ante el “Dream Team” dando cátedra de fútbol, donde Massaro y Tassotti eran estandartes; se quiere volver a ver al Milán de los “Kakás”, de los “Shevchenkos”, de los “Inzaghis”, de los comandados por Ancellotti que eran un deleite para la pupila de los espectadores.

Hoy, el futbol aun sueña en un futuro prometedor.