Desde la banda

Por: Gabriela Martínez 

¿Alguien sabe dónde está el Manchester City del triplete?

Hace apenas unos meses el equipo de Guardiola maravillaba al mundo del futbol. Todos nos rendíamos ante el City: su juego, toque de balón y efectividad en la portería rival levantaban a los aficionados de sus bancos para aplaudirle al equipo. Sin embargo, hoy la situación está en el polo opuesto.

Ese escenario que hace no mucho era el centro de la euforia, el estadio de Etihad, de pronto hirvió de rabia en los últimos instantes del trepidante empate 3-3 contra el Tottenham porque el árbitro a cargo le negó a Jack Grealish el gol de la victoria. Erling Haaland encolerizó con el árbitro, un exasperado Rúben Dias alzó los brazos y los hinchas de Manchester City abucheaban; ciertamente, una realidad difícil de creer. Así fue como el City finalmente estaría sufriendo con la resaca de su formidable temporada pasada.

Quizás sea un leve declive, pero los tres empates seguidos en la Liga Premier representan la primera vez desde la temporada inicial de Guardiola en que el City obtiene semejante racha de partidos sin ganar. Aunque todos lo sabíamos, hay aspectos preocupantes particularmente en su sala de máquinas.

Al City le ha costado dominar en los tramos finales de varios partidos, sobre todo en el mediocampo. Rodri Hernández se ha visto desbordado por momentos y el Chelsea, Liverpool y Tottenham supieron aprovechar esa vulnerabilidad. Además, la ausencia de John Stones, de buenas prestaciones como central y volante de marca, ha pasado factura y el equipo también ha resentido la salida de Ilkay Gündoğan mientras los recién llegados Mateo Kovačić y Matheus Nunes no acaban de afianzarse.

Por otra parte, está la ambición. Después de ganar tanto, ¿tienen estos jugadores del City las ganas de dar un extra en partidos reñidos? La falta de concentración podría ser un problema; por ejemplo, la displicente entrada de Dias que derivó en el último penal ante el Chelsea. De cualquier manera, Guardiola pudo haber estado preparado para esto y parece asumir la mala racha con serenidad. Tras el polémico final del domingo, dijo que aprendió de su mentor Johan Cruyff que “la mala suerte en el futbol no existe”.

Como sea, el City todavía tiene la oportunidad de recomponer el camino y demostrar que este es solo un pequeño bache.