Jorga Raúl Nacif, el toreo y futbol es su pasión

Malinchismo

El peor enemigo de un mexicano es otro mexicano”, decía Hugo Sánchez con cierta
guasa. Aquella sentencia no está tan alejada de la realidad, pues en nuestro país
prevalece un malinchismo galopante y el ámbito del futbol no es la excepción.

De muchas maneras, los propios mexicanos prefieren darle el “espaldarazo” a un
extranjero. Sin falsos nacionalismos, considero que en nuestro país hay mucho talento
para el futbol, pero los jóvenes se ven eclipsados por jugadores extranjeros que no son
mejores que ellos.

Con insistencia se ha dicho que juega el mejor. Sin embargo, no siempre es así.
Desconozco si es por compromisos con empresas y promotores (o incluso los mismos
directores técnicos se llevan “tajada”), pero hemos visto un sinnúmero de extranjeros que
no son mejores… y siempre juegan.

En su propio país, el talento mexicano se ve bloqueado. Tal parece que hay más
confianza en un futbolista solamente por ser extranjero y se les brindan oportunidades a
diestra y siniestra, incluso pasando de club en club sin que pase algo relevante.

En cambio, si un joven mexicano entra en una mala racha, se le “cortan las alas” y en
poco tiempo comenzamos a verlos en categorías inferiores. Ejemplos se cuentan por
millares; mucha paciencia para los extranjeros y casi nula para los nacionales.

Ésta es quizá una de las respuestas sobre por qué México no está lejos de ser potencia
en categorías inferiores (así lo avalan dos títulos mundiales sub-17 y un Oro Olímpico,
que es sub-23), pero después no pasa absolutamente nada. Hay mucho talento puro en
México… aunque posteriormente no hay apoyo.

Por ejemplo, ahora en la Liga de Expansión han destacado mexicanos cuya exposición en
Primera División fue casi nula. Caso concreto del Atlético Morelia, ahí están los goles de
Eduardo Pérez, un delantero con muy buenas hechuras y que va de líder de goleo.
¿Cómo es posible que jamás tuviera una oportunidad real en el Máximo Circuito?
Ahí está un buen punto de partida para el crecimiento de nuestro futbol y, claro está, de la
Selección Mexicana.

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