Gabriela Martínez

Gabriela Martínez

Por: Gabriela Martínez

Los Yankees necesitan cambiar

Ciudad de México, Ciudad de México a 10 de octubre del 2021.- Hubo un época en la que los Yankees eran la novena más temida de la Grandes Ligas, se les criticaba por su manera de comprar el talento y no desarrollarlo, y tenían una gran cantidad de fans no solo en Estados Unidos, sino en todo el mundo. No obstante, esos años están en el pasado y lo de hoy son las decepciones; en última instancia la derrota ante Boston en el juego de comodines.

Bogaerts y Schwarber dispararon sendos jonrones ante el as Gerrit Cole y, mientras la pelota se volaba la barda, los aficionados de la novena de Nueva York solo veían como una vez más se quedaban fuera de los playoffs. Una vez más, el dinero no logró que los Yankees llegarán a la meta prometida al inicio de la temporada.

Durante 2021, la novena del Bronx se mostró muy dependiente de los pitchers derechos y de rachas que por momentos hicieron sonreír a su afición y, pese a la incorporación de Odor, Rizzo y Gallo en plena temporada, los bateadores zurdos tuvieron el peor promedio en la liga: .207, fueron vigésimos sextos en jonrones (53) y vigésimos octavos en impulsadas con 148. Por su parte, los derechos batearon .249 con 169 cuadrangulares y 518 empujadas.

Los Yankees saben perfectamente en qué fallaron y es momento de poner manos a la obra porque su público exige y lo hace con razón. El equipo podría caer en el cliché de formar jugadores para así generar más identidad y garantizar mejores resultados, pero aceptémoslo, eso no sucederá. Sin embargo, podrían firmar a beisbolistas con las características necesarias para cubrir los huecos de la novena. Una historia ganadora y una nómina salarial de 203.5 millones de dólares, inferior solo a la de los Dodgers, merecen la exigencia de campeonatos a la novena de Nueva York.

Ya dejen de hacer trampa

Las estrictas medidas de las Grandes Ligas tuvieron el impacto deseado poniendo fin a una racha de 12 temporadas consecutivas en donde los ponches habían impuesto récords. Desde la inauguración hasta el 2 de junio, el último día antes de que entraran en vigor las medidas, los bateadores tenían un promedio de .236 con un porcentaje de slugging de .395, un OPS de .707 y un promedio de 4.36 carreras por equipo en cada juego. No obstante, a partir del 3 de junio y hasta el final de la temporada regular, el promedio de bateo aumentó .248 con .419 de porcentaje de slugging, un OPS de .738 y un promedio de 4.62 carreras.

Por favor, es momento de dejar de manchar este deporte. Si no son quienes tienen un bat “arreglado”, son quienes consumen esteroides, quienes se roban señales y ahora quienes usan una sustancia para tener mejor agarre (en el caso de los pitchers). Beisbolistas: tengan más respeto para la afición que los sigue. Lectores: disfruten mucho el mágico octubre beisbolero.

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